martes, 22 de noviembre de 2011


Mi mama de pequeña me enseño a no dejarme llevar por las apariencias, a no creer en lo que no ves; ni un unicornios, ni en gamusinos, me enseño a no fingir si no era necesario, y a no rendirme por nada. Mi mama también me enseño a con que gente me debía juntar, a quienes debería sonreír, y a quienes debería esquivar, mi sonrisa fingida se la regalaba a mucha gente, pero la sincera a pocos, ya que eran pocos los que entendían , había gente a la que ni siquiera me hacia falta sonreír, que con ellos reía sin parar, mi mama no me aviso de eso, no me aviso de que conocería a la persona mas maravillosa del mundo mundial, a aquella a la que le contaría mis secretos, a aquella a la que confiaría sin dudarlo, a aquella que me da "curasanes" para merendar aquella que me enseñara que los unicornios pervertidos violan a gamusinos provocadores, y a que si le das a "spoiler" en el chat no se ve la conversación, aquella persona que me demostró lo que vale la locura(:

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